Solo cuando damos nombre a algo, existe…cobra vida.
Y no vale cualquier palabra. Tiene que ser estratégica, que comunique eficazmente.
Para mi Naming, es tejer con cariño y estrategia palabras para nombrar tus servicios y tus programas
Comparto contigo algunos ejemplos.
Naming para la marca de planificación 3D de CBCT. Un nombre con sonoridad japonesa (tecnología) y que contiene las iniciales CB (muy usadas en el sector).
Naming de un expansor para ortodoncia. Un nombre con sonoridad inglesa, que contiene las iniciales de los apellidos del creador del sistema (Dias Silva) y la evolución de la palabra «expander».
Para mi proyecto quería un nombre evocador, efectivo, con muchos matices y conectado con la esencia de la historia que narro. Mi proyecto habla sobre emociones y desarrollo personal. Me puse a tejer un nombre partiendo de la palabra Serotonina. Se trata de una sustancia bioquímica que ayuda a controlar las emociones y genera sensaciones de bienestar, ya que aumenta el sentimiento de satisfacción, la resiliencia y ayuda a sentirnos más relajados.
Mi objetivo era crear un nombre corto, memorable y con sonoridad inglesa. Como la acción de mí historía transcurre en un pequeño pueblecito, lo más indicado era usar la palabra “Town”. Acortando la palabra Serotonina a Seroton y combinándola con «Town«, tejí la palabra Serotown. Además SERotown contiene la palabra «SER», el ser esencial, es decir, lo que nos queda del ‘yo’ al quitar los condicionamientos y el ruido mental.
Un pueblo donde las emociones se pueden ver y tocar. Una historia que habla de desarrollo personal y de los jardines interiores de sus personajes. Es por ello, que el subtítulo de mi historia es “El pueblecito de los jardines interiores”.
PITT 314 es un robot alienígena cuya nave se estrelló en el pueblecito de Serotown.
Es la pequeña Alma la que lo descubre en uno de sus paseos por el bosque. Ambos se convierten en amigos inseparables. Gracias a ella, PITT un robot sin el chip emocional, comienza a conocer y entender las emociones humanas.
A la hora de tejer el nombre de PITT, me inspiré en varios recuerdos de mi infancia. Primero recordé el nombre de Kitt el Coche Fantástico. Luego, como es un robot, use el número PI (3,1416). Por eso el apellido o número de serie de nuestro metálico amigo. Luego evoque la onomatopeya de un pitido.
Por último hice visible el símbolo de la letra Pi que se forma al juntar las dos «tés« en mayúscula TT. El resultado es este nombre sonoro, breve y evocador… ideal para un robot tan especial